Hasta la muerte “Che”
En nombre de la “Santa Libertad” habla el cura, el político y el marica, con bríos
y resplandores extraordinarios.
Guerras se han proclamado y en su nombre se ha dicho:
¡Qué nos importa la vida, si perdemos el honor!
Luego, el idealista muere, porque fue como u tonto a luchar, en tanto
el “Comandante – Político” con su pragmatismo estratégico se quedó en el
Cuartel General para luego recibir a la familia del combatiente idealista a quien
le dan los respectivos honores de Estado.
En tanto, el Comandante hecho el Estadista apropiado del Estado recibe los
honores en nombre de los Bienes Estatales.
Hasta la muerte “Che”.
Fidel cosechó tu sangre.