Y de las rimas
Sobre esta tierra
descansa mi historia
pica la serpiente
queda tranquila la conciencia
cruzo el Daule
Nadie sabe mi destino
El mango cae
los insectos cantan
y en cada parcela
diminuta
un respiro
de vida multiplicada
Nosotros sólo somos
parte de la minúscula gloria
hombres hechos de noche
y de sangre
pálidos, vacíos
transitamos iluminados por la ira
amenazados por el amor.