Límites crediticios

 

En América Latina seguimos colgando sueños dentro de las perchas de la ilusión.

Antes nos prestaban los Yankees, luego los Europeos, hasta que se cansaron de nuestros desenfrenos. Ahora los Chinos seguramente nos prestarán, hasta que se agoten de nuestros desenfrenos.

Al fin de cuentas, solo los sonsos, los locos, y los malandrines, no reconocen límites.

Trituraciones Variopintas: