Nuevas tempestades
Un derrame profundo vive esta Patria
de tanto palabrerío,
la calle está llena de gente,
pero vacilante ante la esperanza.
Incomparable puede ser nuestra fuerza y franqueza,
si rompemos el mito y la incoherente palabra
que producen nuestros ancestrales y engañosos espejismos.
Quitemos tanto sonso ídolo de nuestra diaria escena,
de lo contrario; los errores seguirán pariendo resultados desastrosos.
Dediquémonos a crear con nuestra inteligencia,
y no pensemos que la ráfaga luminosa de un nuevo bocón nos iluminará.