LAS ALAS DE LAS OLAS
I
Patenas y escapularios:
suicidio de la inteligencia.
II
Con voz y voto,
los arrozales florecen.
III
La mañana aprieta su cáliz.
El sol enciende su antorcha.
IV
Sois el fuego oscuro de la noche
y la armoniosa luna que se hace carne.
V
Cada hoja muere,
lo saben bien las estrellas ahorcadas
aunque los sacerdotes,
con su pulmones,
echen bendiciones y sahumerios.