La vida en cifras dolorosas

“Hacer política por pura vanidad, solo deshumaniza”.

Si el político quiere darnos un canto fecundo,
debe procurar educarse
y ser el primer promotor de la educación,
de lo contrario, las cifras serán aún más dolorosas y dolosas.

Vivimos en un país mágicamente tragicómico,
ya que toda miseria la hemos transformado en folclore.

Patriarcas:

¿Hasta cuándo oímos la letanía
que reencarna día a día el hambre?

La campesina campana suena,
la Catedral urbana se hace eco de tanta frivolidad,
la intelectualidad parece
no haber nacido entre estas latitudes,
mientras se siguen agitando,
diciéndonos que ellos “son académicos”.

La Patria, es un estanque tragicómico
que vibra entre los brebajes líricos de los ilusos
y la codicia de los pragmáticos,
para que todo siga flotando como un “mojón en el río”.

 

DESAPARECERÉ: